- febrero 9, 2015
- Posted by: IMINOX
- Categoría: Aplicaciones en México
Progreso es la ciudad portuaria de Yucatán y tiene el muelle más largo del mundo. Se construyó en 1941 con una longitud de 2.1 km. Sin embargo, al crecer la actividad comercial y aumentar el tráfico de buques cisterna y cargueros, en 1980 se amplió hasta una longitud de 6.5 km.
Un dato curioso es que en 1969 (28 años después de que se construyó el muelle de 2.1 km) se construyó a su lado otro muelle mucho más pequeño con varilla de acero al carbono, pero este muelle no resistió el paso del tiempo. Para el año 2015 el Muelle Progreso tenía ya 74 años de servicio.
Pero ¿qué fue lo que pasó si estaban situados uno al lado del otro y sometidos a las mismas condiciones de un entorno de agua salada, elevada humedad y temperaturas extremas?
Desde el punto de vista de la ingeniería, ambos puentes estaban expuestos a cloruros, por encontrarse sumergidos en el agua de mar o por estar en zonas que reciben oleaje y salpicaduras; con el paso del tiempo, los cloruros penetraron en el concreto y la varilla de acero al carbono con la que estaba construido el muelle de 1969, empezó a corroerse y el óxido resquebrajó el concreto, aumentando aún más la penetración de los cloruros acelerando la corrosión. De esta forma el puente no pudo resistir. Por el contario, el Muelle Progreso contiene varilla de acero inoxidable corrugado AISI 304 (con aleación de níquel) lo que le ha proporcionado mayor robustez y ha frenado considerablemente la velocidad de la corrosión. La varilla de acero inoxidable tiene una excelente resistencia a la corrosión y es altamente resistente al ataque por cloruros en ambientes muy agresivos.
Quizá los constructores siempre lleguen a un dilema o a una disyuntiva al elegir un material. El acero inoxidable puede parecer caro frente al costo más bajo del acero al carbono. Sin embargo este es un buen ejemplo de que se pueden cuantificar las ventajas económicas y aún más… las ambientales de la elección del acero inoxidable en sustitución del acero al carbono.
En un ejercicio de simulación, se determinó que si el muelle de Progreso en 1941 se hubiera construido con varilla de acero al carbono en lugar de utilizar acero inoxidable, el total de los materiales habría costado aproximadamente un 14% menos, pero sin contar los gastos de mantenimiento, rehabilitación y reconstrucción. El mismo ejercicio de simulación arrojó como resultado que después de 79 años de servicio cumplidos en el año 2020, el muelle construido con varilla de acero al carbono resultaría un 44% más costoso que el muelle actual de varilla de acero inoxidable debido a costos de mantenimiento y reconstrucción.
Gracias a esta decisión, además del ahorro mencionado, se ha evitado interrumpir de manera prolongada el servicio del muelle para hacer reparaciones, renovaciones o sustituciones; de esta forma los usuarios no han resultado afectados. Solo ha tenido 2 mantenimientos programados en 1985 y en el 2000; no ha sido necesario el uso periódico de selladores en el concreto y lo más importante… la historia continúa, ya que el muelle sigue funcionando pese a su constante uso industrial y a los efectos del clima y del entorno.
Esta publicación fue redactada tomando la información y fotografías del artículo de la Revista del Instituto del Níquel, Volumen 29, «Un muelle a examen. El acero inoxidable marca la diferencia». Si estás interesado en ver los cuadros comparativos que muestran los costos del ciclo de vida del Muelle Progreso contra los costos del ciclo de vida del diseño alternativo simulado te invitamos a dar click al siguiente pdf:
https://iminox.org.mx/wp-content/uploads/pdfblog/pag8NickelVol29Num1Marzode2014.pdf
Y si estás interesado en conocer más sobre la varilla de acero inoxidable, te invitamos a visitar Aplica Inox en la siguiente liga en dónde podrás ver sus ventajas, usos (puentes viales, reforzamiento/rehabilitación), selección de materiales y una guía para el uso de varilla de acero inoxidable en estructuras de concreto:
http://aplicainox.org/ing/aplicaciones/varilla/